Por cuarta vez,
confié. E hiciste lo que quisiste, como siempre. Por cuarta vez, me vas a pedir perdón. Pero todos sabemos, que, esta vez, no estás seguro de que yo te perdone. Y tenés razón, no pienso volver a equivocarme.
Me cansé, ¿entendés que me cansé? De que me tomes por idiota, por una cosa sin sentimientos. Como si a mí no me doliera lo que hacés. Ya está, lo decidí... OLVIDARTE. O por lo menos
intentarlo, por cuarta vez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario